¿Qué es y para que sirve el Reiki?

El Reiki es una de las terapias alternativas que más ha ido incrementando sus adeptos alrededor del mundo, atravesando poco a poco las fronteras culturales de occidente gracias a sus diversos beneficios a la salud y bienestar de las personas. ¿De qué se trata y para qué sirve esta técnica de sanación milenaria? A continuación veámosla un poco más a detalle.

¿Qué es el Reiki y para qué sirve?

Según la tradición el Reiki podría tener su origen en la región de las montañas del Tibet, en China, hace ya algunos siglos, pero no fue sino hasta 1922 aproximadamente cuando Mikao Usui, un monje y médico japonés, lo descubrió y comenzó a trabajar con la técnica para perfeccionarla, siendo así el primer maestro Reiki en alcanzar el grado máximo de iluminación (satori) .

Para entender el Reiki primero vamos a observar sus raíces, la cual se compone de dos términos REI (universal) y KI (Energía Vital). Por lo que su significado simple quedaría como Energía Vital Universal. Sin embargo, vamos a profundizar un poco más en esto.

El REI hace referencia a un nivel superior de conciencia, a una sabiduría divina. Sin meternos en cuestiones religiosas, estamos hablando de un conocimiento que viene de un lugar más allá de nuestra conciencia y que puede actuar como guía en nuestras vidas.

El KI se refiere a esa energía vital que fluye por todo ser humano. Cuando nos encontramos en sintonía con ella podemos percibir una sensación de bienestar, nos encontramos saludables y en armonía. En cambio, cuando existe algo que interrumpe su flujo se presenta un bloqueo y puede afectarnos tanto física como emocionalmente.

Así encontramos que el Reiki es la técnica mediante la cual podemos ser establecer un canal con aquella sabiduría superior para que active y guíe nuestra energía vital en beneficio de nuestro cuerpo y espíritu y que incluso seamos capaces de transmitirla para el bienestar de otras personas.

¿Para qué sirve el Reiki? 

Como puedes observar, la finalidad del Reiki es establecer una sintonía entre nuestra propia energía vital y la conciencia superior, lo cual nos permitirá mantener el equilibrio y armonía física, mental y espiritual.

A lo largo de nuestra vida diaria atravesamos por diversas situaciones desequilabrantes como el exceso de trabajo, problemas económicos o familiares, accidentes, enfermedades, etc, que nos afectan tanto personalmente como a las personas más cercanas que nos rodean.

Todo esto puede establecer bloqueos en nosotros impidiendo que la energía fluya naturalmente, lo que trae consigo la aparición de malestares físicos o emocionales.

Es aquí donde practicar Reiki sirve como excelente medio para conservar la armonía, bienestar y paz interior, previniendo la aparición de estos malestares, e incluso, ayudar a superarlos para recuperar nuestra salud y vitalidad

Así el Reiki puede ayudarnos a afrontas problemas emocionales como el estrés, ansiedad, fatiga, insomnio o depresión y otros físicos como dolores crónicos o malestares digestivos. Incluso se ha demostrado su efectividad complemento para la recuperación en tratamientos médicos intensos como cirugías y quimioterapias, disminuyendo las molestias ocasionadas por estos. Permitiendo que los pacientes recuperen su salud y tranquilidad en mucho menor tiempo.